Isa Restrepo
Bríndate esperanza. Toda situación comienza sin esperanza. Si hay esperanza, es porque tú se la has aportado.
La esperanza no aparece por cómo son las cosas. La esperanza aparece a partir de tu decisión de sentirla.
Puedes aportarle esperanza a este día. Y luego puedes justificar esa esperanza por la manera en que vives.
La esperanza no es sólo para los jóvenes y los fuertes y los aventajados. La esperanza es para todos aquellos que aman la vida y sus infinitas posibilidades.
Ahora, no importa lo que pase, tú puedes brindar esperanza, y puedes vivir esa esperanza.
No importa lo que pase, tienes tantas razones y capacidades para sentir verdadera alegría como nunca nadie ha tenido.
Así que siente esa alegría, vive con verdadera esperanza, ama y atesora todo lo bueno que tienes en tu vida. Bríndate esperanza, vive en base a ella y déjala demostrar que estaba muy bien fundamentada.