Redacción IWomen
Permanecer en actitud de criticar a los demás, no sólo no conduce a nada, sino que te perjudica más de lo que piensas.
Muchas personas viven tan enfocadas en el afuera y en las otras personas, que no se dan cuenta de la energía que pierden. Además, jamás obtendrán algo diferente ni superador para ellos, para los demás o para el mundo ya que la crítica limita la visión de vida. Cuanto más te ignora la persona a la que diriges tu crítica, te pones más hiriente.
Cuando criticas:
- Pierdes tiempo. Pasarte el día criticando a otros, no te lleva, siquiera, a poder ejecutar un plan de mejora en ti mismo. Como todo lo haces “hacia afuera”, te restas la maravillosa oportunidad de la auto observación consciente, esa que te permitirá saber en qué aspectos puedes progresar.
- Pierdes energía. Las personas enfocadas en la crítica, en vez de los aportes positivos, reconocen tener muy baja energía para vivir su vida.
- Pierdes tu actitud positiva. La crítica no conduce a nada, sobre todo aquella que no encierra oportunidad de mejora evidente.
- Pierdes tu autoestima. Uno de los peores resultados que tienes en tu actitud de criticón hacia todo es que tu autoestima está lastimada y sangrando.
- Pierdes la confianza que te tienen los demás. En un mundo revuelto, casi nadie quiere relacionarse con personas criticonas todo el tiempo.
- Pierdes tu auto control. Al estar tan pendiente de lo que hacen los demás, dejas que el control emocional de tu vida, las riendas, las tenga eso mismo que exudas.
- Pierdes tu equilibrio emocional. La crítica, al igual que la queja, no encierra ningún cambio positivo.
Cuando criticas:
- Acepta las situaciones y a los demás, apenas podemos cambiar algo de nuestras vidas de vez en cuando. Entonces, busca entender, no necesariamente justificar, los puntos de vista de los demás: te traerá ideas nuevas y expandirás tu consciencia de apertura.
- Limita tus críticas y hazlas conscientes, logra un auto-dominio saludable.
- Aporta soluciones: propón opciones superadoras para mejorar las cosas.
Todos los seres humanos hacen lo mejor que saben y pueden, aunque para ti pueda ser diferente. El ser un crítico de los demás y del mundo, no cambia las cosas. El mundo cambia con tu acción.
