El cambio puede ser algo difícil. La gente suele resistirse al cambio, pero el cambio es inevitable. Puede resultar estresante, especialmente cuando es desconocido e incierto.
Sin embargo, el cambio es necesario para el crecimiento. Si bien puede resultar muy cómodo permanecer en un lugar familiar, nunca llegaremos a ser las personas que nos gustaría ser si no estamos dispuestos a ir más allá de lo que nos resulta cómodo.
Mucha gente se vuelve complaciente porque la noción común es que el cambio es malo. Esto no podría estar más lejos de la verdad. El cambio puede ser muy saludable y liberador.
La forma en que respondemos al cambio es una función de nuestra forma de pensar. Cambia de opinión, cambia de perspectiva.
El cambio requiere coraje y compromiso. Coraje significa confiar en ti mismo para superar tus miedos y hacer lo que tienes miedo de hacer. El coraje aumenta la convicción e inspira a otros a enfrentar sus miedos.
El cambio es bueno. Conduce a oportunidades. Esas oportunidades representan un progreso. Seguir avanzando.