Redacción IWomen
Cuidar de la salud mental en todas las etapas de nuestra vida es fundamental, ya que incide tanto en la salud física, emocional y social.
Ya sea que queramos romper ciertos malos hábitos o crear otros nuevos y saludables, el proceso puede ser complicado. De hecho, la mayoría de nosotros hemos tomado resoluciones para romper malos hábitos en el pasado solo para volver a caer en viejos patrones.
Entonces, ¿cómo cambiamos este ciclo? ¿Cómo funcionan los hábitos? ¿Cuáles son los elementos necesarios para romper los malos hábitos y crear otros más saludables?
La creencia popular dice que se necesitan 21 días para formar un nuevo hábito. Sin embargo, un estudio del University College of London ha demostrado que, de hecho, puede llevar entre 18 y 254 días, dependiendo de la complejidad del hábito.
Los hábitos están formados por el llamado 'bucle del hábito' que consta de:
- El Recordatorio (el desencadenante de la conducta).
- La Rutina (el comportamiento mismo).
- La Recompensa (el beneficio del comportamiento).
Entonces, para desarrollar un hábito saludable hace falta lo siguiente:
- Identificar la rutina alrededor del hábito.
Aislar la señal o el recordatorio que desencadena el comportamiento.
- Crear cadenas de comportamiento y elegir un (nuevo) recordatorio.
Crea dos listas; cosas que haces todos los días y cosas que te suceden todos los días. Estas listas te mostrarán dónde y cómo insertar un nuevo hábito.
- Eliminar las opciones excesivas.
Identifica los aspectos de tu vida que no consideres tan importantes y luego haz que esos aspectos sean rutinarios, de modo que te quede energía mental para trabajar en tus hábitos. Elige un hábito saludable con el que sea fácil comenzar. Los grandes cambios en la vida ocurren como producto de los hábitos diarios, no al revés.
- Experimentar con las recompensas.
Crea ciclos de éxito y retroalimentación positiva cuando logre su creciente hábito saludable para ese día.
Al monitorear tus hábitos, puedes considerar usar aplicaciones de seguimiento o usar un simple “gráfico de sí-no” que registre cuántos días has podido practicar el hábito saludable que te has propuesto.
Haz un plan sólido sobre cómo romper los malos hábitos o crear hábitos saludables y cómo monitorearlos. Visualiza tu proceso en lugar del resultado.