Redacción IWomen
La confianza en uno mismo requiere trabajo. A veces esta se ve afectada y tendrás que tomar medidas para recordar de qué eres capaz.
Aquí hay algunos posibles desencadenantes que pueden estar afectando tu confianza:
1. Perfeccionismo
Ser exigente en tu trabajo no es malo. Pero cuando los altos estándares se convierten en perfeccionismo, la crítica interna y las dudas que socavan tu confianza, pueden dañar seriamente tu salud mental y tu autopercepción.
Si un proyecto no cumple con tus estándares, en lugar de entablar un diálogo interno negativo y derribarte, considéralo una experiencia de aprendizaje. ¿Qué salió mal? ¿Hiciste tu mejor esfuerzo? ¿Qué puedes hacer diferente la próxima vez? Acepta que eres humana y trátate a ti misma con compasión.
2. Jefes Micromanagers
Es difícil sentirse segura cuando tu jefe está sobre ti, corrigiendo todo. Puede que sea difícil, pero intenta dar un paso atrás. Recuerda que la microgestión dice más sobre la autoestima de tu jefe que de tus habilidades. En primer lugar, es posible que ni siquiera sepan que están microgestionando.
En lugar de frustrarse, esta es tu oportunidad de practicar la empatía y ofrecer comentarios de apoyo y ayuda (cuando sea apropiado).
3. Desconexión de tu trabajo
No puedes sentirte segura de tus habilidades si no las utilizas. Si su trabajo no aprovecha tus talentos y habilidades, puede afectar tu sentido de compromiso con tu trabajo. Hay algunas estrategias que puedes probar. Cambia tu rutina para ver si tus sentimientos de estancamiento mejoran con una perspectiva diferente, o habla con tu gerente y pregúntale sobre cualquier proyecto que puedas emprender y que aprovecha mejor tus habilidades. Como último recurso, considera buscar una nueva posición que te permita estirar sus alas.
4. Miedo al fracaso
A nadie le gusta fracasar, pero dejar que este miedo te gobierne significa que perderás oportunidades de crecer y desarrollarte. Tener tanto miedo de que los miembros del equipo se burlen de tus ideas que te haga permanecer callada durante las reuniones los priva de tus buenas ideas.
En lugar de eso, enfrenta tu miedo al fracaso de frente. Confía un poco más en ti y emprende un nuevo proyecto. Ofrece tu opinión, incluso si cometes un error, el intento y la experiencia tienen valor.
5. Colegas poco cooperativos o críticos
Las personas desagradables pueden surgir en cualquier lugar, y si tienes que pasar ocho horas al día juntas, pueden ser particularmente desafiantes. Al igual que con un jefe microgestor, responde a la negatividad de esos compañeros con empatía y una actitud positiva siempre que sea posible.
Considera si hay un problema subyacente que cause su comportamiento grosero. Si es así, soluciónalo, lo que puede significar contactar a su supervisor. De lo contrario, siempre que las acciones no constituyan acoso laboral, haz todo lo posible por defenderte o ignorarlas, según las circunstancias.
Aumentar la confianza en uno mismo no es tan sencillo como repetir afirmaciones positivas y cambiar el lenguaje corporal para parecer más asertivo. Se trata de desafiar las inseguridades, afrontar momentos de dudas y silenciar el diálogo interno negativo.