Una vez que hayas leído acerca de los micro movimientos, te encantará incorporarlos a tu día.
Pasamos mucho tiempo rígidamente encorvadas sobre nuestros teléfonos y computadoras y, como estoy segura de que ya sabes, el resultado puede ser dolor de espalda, dolor de cuello, dolores de cabeza y tensión general, solo por nombrar algunos.
Los micro movimientos son pequeños movimientos que puedes realizar a lo largo del día, como mover suavemente la cabeza de un lado a otro, girar la columna, girar las caderas, girar los tobillos, mover la mandíbula, girar los hombros; básicamente, cualquier movimiento pequeño y más suave para relajarte, así que levanta tu cuerpo y alivia la tensión.
Asimismo, las breves pausas en el trabajo tienen muchos beneficios. No sólo por tu salud física, sino también por tu salud mental. Piensa en ellas como un momento para “reiniciar”, tal como lo haría con una computadora con exceso de trabajo.
Es la oportunidad de alejarte de tu escritorio y salir de la posición sentada prolongada. Puedes refrescar tu mente mientras te alejas del trabajo.
Todos tus músculos y articulaciones pueden moverse, estirarse y resetear la postura sostenida en el escritorio.
Incluso tus ojos tienen la oportunidad de descansar del esfuerzo mientras miran la pantalla de la computadora.
¿Cómo incorporar tus micro movimientos?
Una de las mejores formas es tomar un descanso de 1 a 2 minutos cada hora.
La clave es participar en una tarea no relacionada con el trabajo. Las investigaciones han descubierto que es mejor dejar de trabajar y no cambiar a otra actividad relacionada con el trabajo.
Para implementar micro movimientos a tu rutina laboral te recomiendo seguir estos consejos:
- Mueve tu impresora, fotocopiadora o fax a una habitación diferente, o al menos a una distancia no alcanzable de tu escritorio.
- Ponte de pie mientras hablas por teléfono.
- Disfruta de tu almuerzo lejos de la pantalla de tu computadora.
- Utiliza una taza pequeña o una botella de agua para que tengas que levantarte varias veces al día para volver a llenarla.
- Configura una alarma en tu teléfono o computadora como recordatorio para tomar un microdescanso.
- Toma un poco de aire fresco: las investigaciones muestran que 40 segundos de naturaleza son altamente efectivos para mejorar y restaurar tu atención.
- Incorpora estiramientos o ejercicios ligeros en tus microdescansos. Prueba algunos estiramientos ligeros, sentadillas, estocadas o caminatas rápidas.