Migrar no es solo un cambio de geografía, es un salto al vacío lleno de incertidumbre, y Fania Majano lo sabe bien. Dejar su tierra natal para construir un nuevo futuro en España no fue una decisión fácil. “El proceso no fue sencillo; adaptarse a un mercado con dinámicas distintas exige humildad, aprendizaje y mucha paciencia”, recuerda. Pero en esa adaptación encontró una fortaleza inesperada: la diversidad cultural. Aprendió a valorar lo que la hacía única y a convertir esa perspectiva en una ventaja competitiva.
Fania no solo enfrentó los desafíos de ser migrante, sino que los transformó en oportunidades. Uno de sus mayores retos fue construir una red de contactos desde cero, algo esencial en su carrera como Booking Manager y especialista en marketing. Con determinación, realizó eventos, conectó con personas clave y demostró, con trabajo constante, el valor que podía aportar.
La pasión como brújula
Para Fania, su pasión por contar historias y conectar emociones a través de marcas y proyectos ha sido el motor de su carrera. Con más de ocho años de experiencia como Booking Manager de artistas internacionales, ha encontrado en este trabajo una forma de fusionar creatividad, empatía y estrategia. “El mayor reto ha sido gestionar las expectativas de artistas y promotores mientras se lidia con la logística de eventos internacionales”, admite. Aunque también confiesa que lo que más disfruta es ver cómo un proyecto cobra vida y se conecta con millas de personas.
Esta sensibilidad y creatividad también se refleja en proyectos que ha liderado, como La Cachapera, un restaurante venezolano en Barcelona. Transformar ideas en realidades tangibles, liderar equipos y construir marcas que impacten son logros que Fania valora profundamente. “Liderar equipos me ha enseñado la importancia de la comunicación, la confianza y el empoderamiento mutuo para alcanzar objetivos comunes”, afirma.
Resiliencia frente a la adversidad
Si hay algo que define a Fania Majano es su capacidad para convertir el dolor en fuerza. Su vida dio un giro inesperado tras la muerte de su madre, un suceso que coincidió con un viaje a Europa. “Fue un salto lleno de incertidumbre, enfrentando un doble duelo: la pérdida de mi madre y la despedida de mi país”, comparte. Este período, aunque doloroso, marcó el inicio de su transformación personal y profesional.
En medio de las adversidades, Fania descubrió su fortaleza interior. Este evento no solo la impulsó a reinventarse, sino que también le permitió abrazar nuevas oportunidades que la han definido como una mujer con propósito.
Un legado de inspiración
Hoy, Fania es un ejemplo de que el éxito no siempre se mide en grandes conquistas, sino en los pequeños logros diarios que nos acercan a nuestros sueños. Desde cerrar una colaboración entre un artista emergente y una marca reconocida hasta expandir su trabajo como consultora estratégica, Fania continúa construyendo un camino inspirador.
Cuando se le pregunta qué consejo les daría a otras mujeres que enfrentan desafíos similares, su respuesta es clara: “Nunca dejen de creer en su capacidad para lograr lo que se proponen. Aprovechen cada experiencia, incluso los desafíos, como una oportunidad para crecer. Rodéense de personas que las inspiren y recuerden que el camino puede ser difícil, pero siempre vale la pena”.
Mirando hacia el futuro
Fania Majano es mucho más que una profesional destacada; es inspiración para quienes buscan encontrar equilibrio entre sus metas personales y profesionales. Con la mirada puesta en el futuro, Fania tiene claro que sus próximos pasos incluyen expandir su impacto en su profesión y explorar pasatiempos que nutran su creatividad.
Ella es una referencia para todas aquellas que sueñan con transformar sus desafíos en oportunidades y sus pasiones en un legado.
Instagram: @faniamajanoy
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