¿Qué pasa cuando el propietario vende una casa que estás alquilando? Aún cuando la propiedad que alquilas cambie de dueño, por lo general, las leyes protegen a los inquilinos de cualquier perjuicio que se genera por esta transacción, como un desalojo injustificado.
Al alquilar una vivienda, de alguna manera quedas a expensas de un propietario. En la mayoría de los casos, esto no es un impedimento, por el contrario, con un contrato y la responsabilidad que tengas en tus pagos, podrías tener una casa asequible por un largo tiempo. Sin embargo, ¿qué pasaría cuando el dueño decida vender la propiedad? ¿Te quedarías sin hogar?
Cuando un propietario vende la casa que estás alquilando, podrías enfrentar una serie de preocupaciones, en las que el desalojo lidera la lista, seguido de un posible aumento en el precio del alquiler, cambios en el contrato de arrendamiento, la pérdida de tu depósito de seguridad, inspecciones o cambios inesperados en la calidad de los servicios ofrecidos.
No obstante, los inquilinos tienen derechos, por lo que existen reglamentaciones que los protegen.
En principio, es común que tu contrato de arrendamiento se transfiera al nuevo propietario. Esto significa que los términos y condiciones que hayas firmado con el propietario anterior deben ser respetados por el comprador. La vigencia, duración y monto del alquiler serán los mismos. En otras palabras, tienes derecho a seguir ocupando la propiedad hasta el final del plazo que estipule el contrato de arrendamiento que firmaste.
Después de eso, las reglas podrían restablecerse por el nuevo propietario. En tal caso, tendrás la oportunidad de aceptar o negar los nuevos términos, es decir, decidirás si te mantienes en la propiedad con los cambios que establezca el dueño actual o buscas otras alternativas.