Los tratamientos de alisado para el cabello han ganado popularidad en los últimos años como una solución para lograr un cabello liso y manejable. La queratina y el alisado japonés, entre otros, prometen resultados duraderos y un cabello libre de frizz. Sin embargo, como cualquier tratamiento de belleza, los alisados tienen sus pros y contras. 

Los resultados a primera vista, y luego de aplicar estos tratamientos, son increíbes, pero tienen otras bondades. Los tratamientos de alisado son conocidos por eliminar el frizz, lo que es especialmente beneficioso para quienes viven en climas húmedos. Esto se debe a que estos tratamientos sellan la cutícula del cabello, evitando que la humedad entre y cause frizz.

Además, con el cabello alisado, la rutina diaria de cuidado del cabello puede ser mucho más rápida y sencilla. Dependiendo del tipo de tratamiento, los resultados pueden durar de tres meses a un año, lo que significa que no tendrás que preocuparte por el mantenimiento constante.

El uso de productos químicos fuertes en tratamientos de alisado puede debilitar y dañar el cabello a largo plazo. El calor y los químicos pueden causar que el cabello se vuelva quebradizo y propenso a las puntas abiertas.

Asimismo, los tratamientos de alisado profesional pueden ser costosos, y los costos no se detienen con el tratamiento inicial. Los productos de mantenimiento y las sesiones de retoque pueden aumentar el gasto.

Hay que tener claro que algunos tratamientos de alisado utilizan formaldehído, una sustancia química que puede ser perjudicial si se inhala en grandes cantidades. Es clave asegurarse de que el salón de belleza esté bien ventilado durante el tratamiento.

Los mejores productos para el alisado del cabello