Florida, que alguna vez fue considerada el lugar ideal para vivir sus años dorados, está perdiendo rápidamente el favor de las personas en edad de jubilación.
Los trabajadores remotos y los ricos están acudiendo en masa al estado y haciendo subir los precios de las viviendas, dejando a quienes tienen ingresos fijos sintiendo la presión.
En sólo media década, el precio promedio de una casa unifamiliar en Florida aumentó 150.000 dólares, o un 60%. Según Redfin, el costo promedio de una casa en marzo de 2018 era de aproximadamente $250,000. En marzo de 2023, era de aproximadamente 400.000 dólares.
Pero las viviendas caras no son lo único que aleja a los jubilados del estado. La inflación y las caídas del mercado de valores también han impactado negativamente su situación financiera.
En respuesta, las personas mayores buscan lugares más asequibles para llamar hogar. Por ejemplo, muchos se están mudando al condado de Limestone, Alabama, el condado de más rápido crecimiento del estado.
El área cuenta con propiedades frente al lago, clima cálido e impuestos a la propiedad bajos, por lo que tiene sentido que se considere un sustituto del Estado del Sol.
¿Qué deberías hacer?
Si está a punto de jubilarte, es posible que desees elegir una región menos tradicional para residir después de dejar el trabajo. Pueblos como Sequim, Washington; Linden, Michigan y Thermopolis, Wyoming, ofrecen ventajas como viviendas más asequibles, trato fiscal favorable y proximidad a las principales áreas metropolitanas.
Pero no importa dónde vivas, hay ciertas cosas que debes hacer con tu dinero. Por ejemplo, debe seguir invirtiendo, reservar dinero para emergencias, mantener un plan patrimonial actualizado y mantenerte (o quedar) libre de deudas. De esa manera, tu efectivo se estira más y te sientes más seguro.
