Bancos en todo el país se están “volviendo ecológicos”, una tendencia en la que participan los bancos tradicionales y los bancos más nuevos con modelos de negocio explícitamente sostenibles.
Citizens Bank tiene una iniciativa sostenible que se centra en reducir sus emisiones, apoyar a los clientes en una transición sostenible y asociarse con las comunidades para el impacto local.
NY Green Bank, un banco sostenible con sede en Nueva York, ha introducido un nuevo modelo para financiar paneles solares.
A medida que los bancos cambian sus modelos de negocio para ser más sostenibles, también hay pasos que puede tomar para participar en la transición.
¿Qué es la banca sostenible?
Hay varias definiciones de banca sostenible, y no siempre significan lo mismo. Sin embargo, una de las formas más comunes de definir la banca sostenible es la planificación y ejecución de actividades bancarias mientras se consideran los factores ESG (ambientales, sociales y de gobierno).
En otras palabras, la banca sostenible es un enfoque que enfatiza un impacto positivo en el medio ambiente, la comunidad y la cultura de la empresa.
Formas de implementar una banca sostenible
Como consumidor, hay muchas opciones que puedes tomar para implementar una banca sostenible. Aquí hay algunas a considerar.
- Opta por los extractos electrónicas
Optar por los estados de cuenta electrónicos y otras comunicaciones electrónicas es una de las formas más rápidas y fáciles de ser un cliente bancario más sostenible.
Recibir estados de cuenta en papel cada mes significa más uso de papel y tinta, así como más emisiones del transporte de su correo. Cuando recibes tus comunicaciones electrónicamente, hay menos impacto ambiental negativo.
- Investiga la cartera de préstamos e inversiones de tu banco
Tomar ciertas decisiones de consumo puede ayudar a promulgar los cambios que queremos ver en el mundo. Los bancos tienen un poder similar, tal vez en una medida aún mayor, ya que prestan e invierten grandes cantidades de dinero.
Algunos bancos pueden prestar o invertir en industrias y prácticas perjudiciales para el medio ambiente, como los combustibles fósiles o la deforestación. Si la sostenibilidad es importante para ti, evitar bancos como este puede ser algo a considerar.
No siempre es fácil averiguar a dónde va el dinero de tu banco, pero hay herramientas que pueden ayudar. Puedes visitar BankTrack, una organización sin fines de lucro que rastrea la sostenibilidad de los bancos de todo el mundo, centrándose en su participación en proyectos controvertidos.
Moody’s ESG Solutions y S&P Global’s ESG Scores también proporcionan calificaciones detalladas del rendimiento ESG de los bancos.
- Elige un banco sostenible
Una de las mejores maneras de implementar una banca sostenible en tu vida es elegir un banco sostenible.
Para empezar, comprueba si tu banco actual está dando los pasos correctos en torno a ESG. Por ejemplo, debe tener políticas y prácticas éticas, invertir en industrias como la energía renovable y tener transparencia y responsabilidad.
Si este no es el caso, es posible que debas seleccionar un nuevo banco con la filosofía ESG adecuada. Hay muchos bancos sostenibles en funcionamiento hoy en día. Bancos como Southern Bancorp & Trust, National Cooperative Bank y Decorah Bank & Trust son todos B-corps certificados o parte de la Alianza Global para la Banca sobre Valores (GABV).
- Ten cuidado con el “lavado verde”
El lavado verde ocurre cuando una empresa utiliza su participación en proyectos ecológicos para distraer participación en los no tan ecológicos.
Por lo general, las cosas que la empresa está diciendo sobre los proyectos sostenibles son ciertas. Sin embargo, cuando una empresa es un lavado verde, no menciona el hecho de que sus prácticas perjudiciales para el medio ambiente son mucho más grandes que las que son sostenibles.
Un banco puede estar prestando e invierte unos pocos millones de dólares en proyectos solares y eólicos. Por supuesto, eso probablemente suene muy bien para el consumidor promedio. Pero también es posible que el banco esté invirtiendo por otro lado miles de millones de dólares en proyectos perjudiciales para el medio ambiente.
Por eso es importante tener una imagen completa, incluso si un banco se promociona a sí mismo como “verde” o sostenible.
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