Quedarse atrás en tus objetivos de ahorro puede ocurrir en un instante. Todo lo que necesitas es una factura inesperada que te obligue a desviarte de tu plan de ahorro durante un par de meses o más. Esto es algo tan común que quedarse atrás es el escenario más probable.

Pero no te desanimes cuando te quedas atrás. La clave es implementar un plan para ponerse al día lo más rápido posible, y no hay mejor momento que el presente. 

Si estás atrasado en tus objetivos de ahorro, aquí hay algunas cosas que puedes hacer para ponerte al día.

Las tasas de interés se han disparado en los últimos años, gracias a una serie de aumentos de tasas de la Reserva Federal diseñados para controlar la inflación. Si aún no lo has hecho, es un buen momento para aprovechar las altas tasas de interés abriendo una cuenta de alto rendimiento. 

Algunas cuentas de efectivo de alto rendimiento, otorgan a los nuevos clientes hasta un 5,50 % de APY variable* con un depósito calificado durante tres meses (con una tasa base de 5,00 % después); eso es más de 11 veces el promedio nacional**. 

El poder del interés compuesto es algo hermoso. Si guardas tu dinero en una cuenta de ahorros tradicional, probablemente te estés perdiendo dinero gratis en forma de intereses. Como referencia, la cuenta de ahorro promedio nacional paga solo el 0,46% APY, al 15 de abril de 2024, según la FDIC.

Una vez que hayas establecido una cuenta que te pague tasas de interés competitivas, configura una transferencia automática para asegurarte de agregar dinero con regularidad. Muchos consumidores establecen depósitos mensuales, aunque podrías hacerlo con más frecuencia para ayudar a generar ahorros aún más rápidamente. La mayoría de los bancos y cooperativas de crédito ofrecen la opción de configurar ahorros automáticos en sus sitios web o mediante sus aplicaciones móviles. También puedes pedirle a tu empleador que realice depósitos directos en tu cuenta en cada período de pago.

Ponerse al día con tus objetivos de ahorro a menudo significa encontrar espacio en tu presupuesto para destinar una mayor cantidad de dinero a ahorros cada mes. El primer paso es evaluar tu presupuesto e identificar áreas potenciales para recortar gastos. Piensa en elementos sin los que puedes vivir, como suscripciones o membresías que no utilices con tanta frecuencia.

Si sales a cenar con regularidad, te sorprendería cuánto puedes ahorrar cocinando en casa. La clave es vivir muy por debajo de tus posibilidades, de modo que puedas destinar el dinero extra a acelerar tus ahorros.

Reducir los gastos es una forma de reforzar tus ahorros. Otra forma es encontrar nuevas formas de obtener ingresos. Esto puede realizarse mediante la identificación de oportunidades de inversión para ayudar a aumentar tu patrimonio, como la creación de una cuenta con un corredor en línea. Aquí la atención debe centrarse en rendimientos históricamente confiables y a largo plazo que eventualmente complementarán sus ahorros bancarios y de jubilación.

Una forma más rápida de aumentar tus ingresos es encontrar un trabajo a tiempo parcial o un trabajo secundario que aproveche tu tiempo libre para ganar dinero. Los trabajos secundarios y los trabajos a tiempo parcial pueden variar desde conductor de Uber o representante de ventas hasta desempeñarse como consultor profesional. Has un balance de tus habilidades, experiencia y conocimientos y piensa en formas de monetizarlos. 

Otra forma de empezar a ponerte al día con tus ahorros es depositar el dinero extra directamente en tu cuenta de ahorros. Esto podría venir en forma de préstamos u otras deudas que hayas pagado. Cuando tenga una factura menos que pagar, mueva el dinero a tus ahorros en lugar de gastarlo. Lo mismo se aplica si recibes una bonificación laboral, una comisión, un dividendo en acciones, un reembolso de productos o cualquier otro aumento temporal de tus ingresos. Al priorizar tus ahorros, alcanzarás tus objetivos mucho más rápido.

Si tienes una cuenta de jubilación patrocinada por una empresa, como una 401(k), o una cuenta de jubilación individual, comienza a maximizar tus contribuciones si puedes permitírtelo. 

En 2024, el límite anual para las contribuciones 401(k) es de $23,000 si tiene menos de 50 años. Si tienes 50 años o más, la contribución de recuperación es de $7,500. Y el límite para las cuentas IRA es de $7,000 para los menores de 50 años y de $8,000 para los mayores de 50 años. 

Las contribuciones a estas cuentas son antes de impuestos, lo que reduce tu ingreso sujeto a impuestos ahora pero permite que tu dinero crezca con impuestos diferidos hasta que llegues a la jubilación. Si no puedes contribuir el máximo, contribuye al menos lo suficiente para recibir las contribuciones equivalentes disponibles de tu empleador. Este es dinero gratis que no querrás perder. Al maximizar tus planes de jubilación, al menos sabrás que una de tus cuentas de ahorro disfrutará de un crecimiento acelerado mientras te pones al día con las demás.